Método creado en neurofisiología por Horsley y Clarke y utilizado más recientemente en el hombre (Spiegel; Talairach; Leksell). Consiste en alcanzar una región profunda del cerebro, previamente definida por sus coordenadas en los tres planos del espacio, con un electrodo que penetra en el cráneo por un simple orificio de trepanación y que es guiado por un aparato especial según los datos de la localización previa.