Encefalitis pandémica surgida entre 1916 y la década de 1920 a 1930 y causante de millones de víctimas. Nunca se aisló el agente infeccioso, pero se sospecha de una posible reacción inmunitaria frente a un virus o una bacteria no identificados. Hoy se observan casos esporádicos similares con gran rareza. Se caracteriza por una fase aguda febril con trastornos del estado de alerta (letargo), seguida de una fase de secuelas con parkinsonismo, movimientos anormales, oftalmoparesia con crisis oculógiras y trastornos de la conducta.