Radiografía de las cisternas de la base del cráneo. Se insufla aire (20 a 40 ml) por punción lumbar y se sigue su curso intracraneal por medio de radiografías seriadas; se observa la inyección progresiva de las cisternas, al mismo tiempo que los ventrículos y los espacios subaracnoideos. Este método permite precisar las lesiones de la región hipofisoquiasmática y las anomalías de circulación del líquido cefalorraquídeo.