Supresión de la sensibilidad provocada por un estado morboso (afecciones neumológicas) o de forma artificialmente (por una intervención quirúrgica). Se habla de anestesia general cuando el agente anestésico se administra por vía inhalante o venosa y afecta al sistema nervioso central, de anestesia regional cuando por medio de una inyección local la anestesia queda limitada a una parte del cuerpo, como la anestesia epidural* y peridural*, y de anestesia local cuando la zona en la que actúa se limita a la parte del cuerpo en que se está trabajando o que duele, por ejemplo en la realización de puntos de sutura o en la extracción de piezas dentales.