El tiempo es crucial a la hora de diagnosticar y tratar accidentes cerebrovasculares. Fleni acaba de convertirse en el primer instituto médico de Argentina en contar con el software Rapid, que permite evaluar de forma rápida y con exactitud a los pacientes con ACV.

Fleni incorpora el nuevo software Rapid para mejorar el diagnóstico y tratamiento de accidentes cerebrovasculares (ACV), uno de los objetivos que se había fijado en su proyecto anual 2019. De esta forma, el instituto de neurociencias se convierte en el primero en el país en contar con esta moderna herramienta.

“Este software, que se incorpora a los procedimientos habituales de tomografía y resonancia magnética, permite seleccionar mejor los pacientes con ACV agudos para que puedan recibir los tratamientos correspondientes”,  aseguró el doctor Sebastián Ameriso, jefe del Centro Integral de Neurología Vascular de Fleni.

Según explicó, esto representa un gran avance, ya que permite determinar de forma rápida y con exactitud en el momento en que el paciente llega a la institución la magnitud del daño cerebral que se produjo y la presencia de tejido cerebral potencialmente rescatable.

Una ventana de tiempo mayor

“Esto nos permite adecuar mucho mejor los tratamientos y por otro lado prolongar lo que llamamos la ventana de tiempo, que habitualmente es de 4 horas y media. Con esta tecnología, podemos tratar pacientes aún más allá de esa ventana. Es un avance realmente importante”, añadió el doctor Ameriso.

Para recaudar los fondos para adquirir este equipamiento, Fleni celebró, entre otras actividades, su tradicional Gala Solidaria en el Teatro Colón en noviembre del año pasado.

De acuerdo con datos obtenidos de los estudios SIFHON y EstEPA realizados por Fleni, en Argentina se registran entre 40.000 y 60.000 ACV por año, así como cerca de 18.000 muertes asociadas a esta enfermedad. Además, se estima que cerca de 340.000 personas (el 2 por ciento de la población adulta de Argentina) viven con secuelas de un ACV.

Por otra parte, el doctor Ameriso insistió en que, a pesar de la cuarentena debido a la pandemia de coronavirus, es importante que “el ACV no se quede en casa”, y que quienes tienen síntomas de estar sufriendo un ACV (dificultad para hablar y entender lo que otros están diciendo, parálisis o entumecimiento de la cara, el brazo o la pierna, problemas para ver, problemas para caminar y/o dolor de cabeza) concurran de inmediato a una guardia médica, aun con síntomas leves o transitorios.